jueves, 14 de marzo de 2013

LOS AMANTES PASAJEROS (2013), de Pedro Almodóvar

Estar en el interior de un avión puede ser, sin demasiado esfuerzo, una muestra representativa de lo que es la España de nuestros días. Promiscuidad, alcohol, corrupción, chantaje, asesinato, infidelidad, deseo y frustración a tutiplén. Basta con echar una mirada alrededor para darse cuenta de que se ha fallado estrepitosamente. Las vidas solo piensan en el instante siguiente y nunca en el aterrizaje porque, total, para lo que hay que vivir, más vale instalarse en las nubes o, mejor aún, más vale bajar las nubes al suelo para que podamos pisarlas también, escondernos entre ellas y hacer que la fiesta continúe a pesar de que la desgracia se haya convertido en el punto de fuga ideal para hacer que todo sea una sonrisilla desangelada y muy, muy mariposona.
Tal vez yo ya sea un anticuado y lo que me ofrecen a bordo de un avión sea, por lo general, nada. O quizá los tiempos han cambiado tanto que el nivel de la risa esté por debajo de la cotización del crítico de cine. No lo sé. Pero es que más vale echarse un sueñecito a costa de un poco de hipnosis almodovariana que estar preocupado por los dimes y diretes propiciados por una estrella del tres al cuarto, por la cantidad de pasta que se ha embolsado un ladrón que merece que le llamen otra cosa (justo la que están pensando), por los rollitos existenciales de un actor sin chispa, por los anhelos de una vidente que se cifran en la pérdida de la virginidad y en la percepción del continuo hedor de muerte, por el misterio que emana un tipo elegante y sin demasiado carisma, por la excitante somnolencia que experimenta una joven que es más excitante dormida que despierta, por la supuesta gracia de tres azafatos salidos, airosos, santificados y cotillas y por las salidas y quedadas de armario de dos pilotos serios y apuestos. Sinceramente, me vale que se opine que, con este punto de partida, hay material para hacer una comedia desternillante y otra, muy distinta, es que lo sea.
Pedro Almodóvar sabe hacer reír. Lo sé. Pero el ejercicio de autocomplacencia que hace con esta película llega a ser tan aburrido como un viaje en avión. Más que nada porque no se atreve a hacer una comedia loca, enredada, vibrante, como sí lo fue Mujeres al borde de un ataque de nervios. Se queda en eso, en una serie de situaciones de chascarrillo apoyadas en la supuesta gracia del amaneramiento permanente (un pelín ya pasado de moda) que ni siquiera pone el énfasis en el punto central de la trama que es la maniobra de evasión perpetua del españolito (no medio porque van en clase Business) cuando en el horizonte se ven nubarrones repletos de dificultades que pueden llegar a ser muy serias.
Así que todo se le queda en un intento cañí de Aterriza como puedas mezclado con un punto de la saga Aeropuerto regado con unos cuantos vasos bien cargaditos de Agua de Valencia aliñados con unos psicotrópicos de gracia escatológica muy lejana y con una especie de lugar común en forma de Vidas cruzadas. Eso sí, que no falte el puntillo melodramático ni las apariciones especiales de los amiguetes, tal vez porque el propio Almodóvar es bastante consciente de que la película ni tiene pretensiones, ni posibilidad de tenerlas. Aún así, la música de Alberto Iglesias es de clase superior, el trabajo coral del elenco funciona con garbo a pesar de lidiar con unos diálogos que parecen querer decir que Almodóvar ha querido fabricar una comedia pero que, la verdad, tiene muy pocas ganas de reír. Y eso duele.
Ahora mismo, pensando en ello, estoy por acompañar este artículo de una banda sonora sugerente como Never can say goodbye, ponerme hasta la chaveta de alguna bebida con cubitos de hielo tintineantes, colocarme una camisa bien prieta a pesar de mi desgastada figura y dejar que mis dedos vuelen finamente sobre el teclado. Lo mismo me pongo descarada y loca, loca en plenas letras. Ganas no me faltan. Total para que esto se lea y se olvide...... 

14 comentarios:

Carpet dijo...

Pues tengo muchisima prisa (que me tengo que ir a una reunión), pero sin perjuicio de loq ue pueda decir luego no em quedo con las ganas de decir que esta película es una autentico fraude. de lejos la peor de las que he visto de Almodovar (que creo que me faltan un par de ellas). Por varios motivos, el primero porque efectivamente no se pueden hacer comedias si no tienes ganas de reir (que atinado has estado ahí, Wolf); el segundo porque no se puede construir una comedia en el siglo 21 con gracietas de los 80; el tercero proque una cosa esque tengas un sello y otra autorefernciarse continuamente, el cuarto porque el punto álgido de la peli no puede ser una gracieta coreografiada que puede valer para youtube, pero no para llenar 7 minutos de una peli (eso es no saber tratar lo que tienes entre manos, profundizaré si hace falta); el cuarto porque los chistes escatológicos-sexuales pueden tener un hueco, pero no ser omnipresentes;....

Y no puedo seguir que me voy, si acaso luego regreso.

Abrazos despegando

César Bardés dijo...

Bueno, cuando leas esto ya habrás vuelto de la reunión. Espero que no haya habido ejecutivos agresivos que hayan puesto las americanas al vuelo y se hayan marcado un "We are family" mientras los demáis coreáis y comenzáis una orgía heterehomosexual. La verdad, la imagen que daríais de la empresa sería muy poco seria.
Por otro lado, pues sí, tienes razón. Pero es que Almodóvar tiene algo de eso en sus películas, de fraude, de querer hacer algo que no le sale. Creo, sinceramente, que sus mejores películas siguen siendo "Mujeres al borde de un ataque de nervios" porque ahí supo hacer reír, supo parodiar y supo manejar un espacio cerrado; "Matador", porque puso en juego una estética que a mí me resulta fascinante aunque, tal vez, sea la menor almodovariana de sus películas; y "Hable con ella" porque ahí sí que profundiza en los terrenos del melodrama y sabe contenerse, sabe ridiculizar sin ser ridículo, sabe de lo que habla y cómo hablarlo. Luego hay películas de él que me pueden gustar más o menos. Creo que perdió una oportunidad de oro con "Los abrazos rotos", que ahí tenía material más que de sobra para hacer una espléndida película negra. Creo que "La piel que habito" (además de palidecer al lado de "Los ojos sin rostro", de Franju) es un melodrama absurdo, sin juicio, sin rumbo y sin ni siquiera una lógica almodovariana dentro. Creo que "La ley del deseo" es una película que está bien aunque no me enloquece. "Pepi" y "Laberinto de pasiones" me parecen puros experimentos de alguien que está aprendiendo el oficio pero que apuntan a un cineasta que sí quiere hacer algo diferente. "La flor de mi secreto" me parece un auténtico coñazo. "Todo sobre mi madre" me parece una maravilla en sus primeros quince minutos y cae en picado en el resto. "Átame" me gusta, es una buena película. "La mala educación" es mala película, se pongan como se pongan los expertos. "Carne trémula" no me dice nada y ahí, nuevamente, desperdicia la oportunidad de hacer algo negro con mucha autoridad. "Kika" también es mala, directamente. "Tacones lejanos" tiene cosillas pero en su conjunto me parece desequilibrada. Y, por supuesto, "Entre tinieblas", siendo una película técnicamente muy inferior a ésta, es mil veces más divertida. Ésta es un fraude, sí. Pero si te has fijado, mi repaso no es gratuito. Es un cineasta que no me enloquece y sin embargo me he tragado su filmografía completa. Con un par de Aguas de Valencia.
Tus razones coinciden casi exactamente con las mías para considerar que esta película no vale nada así que nada "nos llamamos y quedamos".
Abrazos sin catering.

César Bardés dijo...

Ah, y un comentario más un tanto airado ahora que estás reunido. Cualquier otro cineasta se atreve a poner a tres tíos mariconeando como lo hacen aquí y los colectivos homosexuales ya estarían protestando por la imagen que se da de los homosexuales y demás excusas políticamente correctos. Ah, pero Almodóvar es Almodóvar y, claro, él lo hace sin mala fe, en plan chiste.
Abrazos amanerados.

Anónimo dijo...

Una serie de cuestiones personales me han impedido acercarme al cine a ver la peli, porque pese a todo, sí me apetece verla. De Almodóvar, como de Spielberg, como de Marty, como de Wood, hay que ver todo aunque sea para criticar y ponerles a parir.

Cierto lo que dices al final. De hecho cuando vi el trailer pensé que el bailecito era una performance que se utilizaba como promoción, y que no pertenecía a la película propiamente. Dioss, me temo lo peor.

Abrazos temerosos

César Bardés dijo...

Pues si te digo la verdad, Dex. Yo pensé exactamente igual. Me dije: "Mira, un vídeo musical para promocionar la peli. A pesar del mariconeo evidente pues mira, vale, ya sabemos cómo es Almodóvar". Pero no. Está dentro de la película y ese plan es continuo.
Hace muchos años, mi mujer estaba de profesora en una famosa universidad y hasta allí se acercó un suizo (yo no sé si esto lo he contado antes, puede que sí) para aprender español. Mi mujer siempre dedicó una de sus clases a hablar del cine español y demás y ella confiesa tener una admiración evidente hacia Mario Camus, por ejemplo. El suizo, teatralmente, dijo en plena clase:
- Te olvidas del hombre que mejor y más certeramente ha retratado a la mujer española.
Mi mujer dijo:
- ¿Quién?
Y el suizo, con cara de éxtasis, dijo:
- ¡Pedro!
Mi mujer, obviamente, no dijo nada en clase pero tanto ella como yo pensamos que si es verdad que Pedro Almodóvar es el que mejor ha sabido retratar a la mujer española, si yo fuera mujer me sentiría insultada hasta las cachas.
Pues lo mismo con los homosexuales con ésta.
Abrazos en vilo.

carpet dijo...

Si, ya he llegado de la reunión y ahora me espera una comida de trabajo (desde la crisis trabajo por lo que me pagan o incluso más).

En el entreacto voy a timar un poco a mi empresa y a dedidcarme a la poco productiva tarea de charlar de otra cosa.

Lamento que Dex no la haya visto porque mi vehemencia puede llevarme a destriparle alguna cosa, que ya puestos tampoco le va a resultar novedosa.

En cuanto al repaso de la filmografia almodovariana, coincidimos bastante, salvo que ami con sus defectos, "La ley del deseo" me parece una película muy notable (a mi es la que más me gusta desde el punto de vista personal, no cinematográfico). "Los abrazos rotos" y "La flor de mi silencio" son mis dos vacios, me apetece un poco la primera, pero nada la segunda. Y "la mala educación" es un semivacio porque vi a primera media hora y decidi no soportarla más...nunca.
Me gusta que comentes lo de "Entre tinieblas" porque precisamente yo pensé lo mismo, antes de referirse a "Mujeres..." que es una gran comedia con ribetes incluso clásicos, "Los amnates pasajeros" remite a algunos chistes que podían funcionar en aquella época y en el tono "voy a hacer una peli cachondeo sin niguna relevancia". En aquellos entonces podía valer por el punto transgresor, pero en esta ni siquiera hay transgresión, salvo que entendamos como tal que las "locas" están a todas horas pensando en penes que llevarse a la boca (a todas horas y suceda lo que suceda en su vida).

También pensé que era una película profundamente homófoba, que luego saldrá uno en El club de la comedia haciendo un chiste de maricas (ya no hay gay que son todos julandrones) con pluma y alguno le dirá que es irrespetuoso.
No sé si Pedro Zerolo, Amenabar o Grande Marlaska (por decir alguno de los gays más señeros y supuestamente serios) le reirán la gracia a Pedro, pero a mi me pareció insultante.

Además hay un guión vergonzante, no sólo por los dialogos y chistes pretendidamente graciosos, sino porque las supuestas historias dispares que propone están tan deslavazadas que nunca llegan a interesarte. de hecho, la única que parece que puede tener chicha y
hasta un desarrollo propio, la de Willy Toledo, Paz vega y Blanca Suarez (muy almodovariana en su concepción melodramática) se va a los 15 minutos y deja de tener interés hasta para el propio pedro que la abandona sin ningún rigor y la retoma con cierta inapetencia para la conclusión final. Eso de "Me voy a dormir y no me molestéis hasta que no hayamos aterrizado" es el colmo de la desidia.

El interés de meter un número musical que tiene Almodovar en todas sus películas pueden llevar a errores garrafales y algún acierto. Entre los segundos podríamos incluir la canción de la fiesta en "La piel que habito" o incluso los de Bosé en "Tacones lejanos", entre los errores el de "Volver" (Penelope con la voz de Estrella Morente queda fatal y además está tan poco justificado que chirria por mucho que la Pe se currara el playback) o el bailecito carcelario de Bibi en la misma "Tacones..." (¿fue en esa verdad?). pero lo de esta clama al cielo, porque meter una canción e incluso una coreografia en coña puede tener su gracia si controlas la medida, pongamos por ejemplo "La boda de mi mejor amigo", pero si es una Flashmob de tres que a nadie interesa (a ningún personaje, me refiero) no se puede alragar absurdamente, y si lo haces juegatela a plano fijo, no a movimientos de camara, enfoques y montaje....queda absolutamente fuera de todo lo aceotable....


Ahhh, diría otras 25 cosas más, pero me reclama el deber.

Abrazos interrumpidos.

César Bardés dijo...

Pues estoy bastante de acuerdo en todo lo que dices. La historia de Willy Toledo está marcada por una desidia que da un poco de grima porque es ahí precisamente donde Pedro mete un poco de melodrama y lo deja en el aire, lo resuelve chapuceramente y a otra cosa, mariposa (y nunca mejor dicho). Hay que decir, por otro lado, que sabe muy bien fotografiar a Blanca Suárez y muy mal a Paz Vega. Casi, casi, la única sonrisa que se me saca en toda la película es el hecho de que Paz Vega se moleste en contestar al móvil cuando está a punto de suicidarse (no descubro nada).
Por lo demás, sí, es insultante para los gays porque, al fin y al cabo, pone en solfa y en evidencia algunos de los estereotipos más señeros de una época pasada. Y les hace un flaco favor, además.
Es verdad lo de los numeritos musicales de Almodóvar. Mucho se ha criticado la costumbre de una gran parte de nuestra filmografía de meter a la folclórica de turno para hacer su numerito coplero viniera o no viniera el caso. A mí me chirría mucho esa costumbre almodovariana, me interrumpe todo, desde el mal rollo que pueda tener hasta el bueno. Creo que no viene al caso y es algo que no añade nada nuevo a la supuesta trama que te está contando el interfecto. Además es todavía peor el uso del "playback" que remite a la más profunda serie Z folclórica. Trueba hace lo mismo con "La niña de tus ojos" pero lo hace con un propósito dramático, lo cual no deja de ser meritorio porque la trama, de alguna manera, avanza. Y si lo mete, lo mete de absoluto cachondeo, como puede ser el numerito del francés en "Belle Epoque". El bailecito carcelario de Bibi es en "Tacones lejanos", sí. La justificación para meter en esta ocasión el "I´m so excited" de las Pointer Sisters solamente es el de subrayar las ganas que tienen los tres azafatos de hacer de loca en medio del pasaje. Que sí, que es muy español eso de coger el punto de fuga en una situación crítica que, supongo aunque no pondría la mano en el fuego, es la intención de Almodóvar pero todo eso que vas viendo, no tiene ningún sentido y, como puedes ver, el artículo del que hablábamos ayer está roto en mil pedazos con su propia formulación en esta comedia que se queda en tierra antes incluso de entrar el pasaje.
Ahora bien, dicho esto, tampoco estoy de acuerdo con que Boyero haga sangre de esto porque, lo dicho, si esta película la dirige cualquier otro no se habla así de él ni de su obra como lo ha hecho el amigo Carlos.
Abrazos críticos.

Anónimo dijo...

Lo que pasa es que si esta película la dirige otro tampoco lleva lo que lleva detrás esta. Y la crítica del amigo, rencillas personales aparte, también va un poco por ahí.

Abrazos criticones

César Bardés dijo...

Sí, claro, bien que nombra a Ozores. Eso sí, ya entonces (y estamos hablando de los ochenta) se le criticaba muchísimo a Ozores que saliera Pajares o Esteso haciendo de sarasa con pluma. Lo hace Pedro y la cosa tiene su gracia, según algunos. Otros le defienden a ultranza. Boyero, simplemente, yerra el tiro. No creo que la intención última de Almodóvar sea decirle a la gente que la bisexualidad y el cachondeo sea la releche en Agua de Valencia. Creo, sinceramente, que Almodóvar ha escondido una intención muy triste tras tanto pavoneo y es la certeza de que mejor desligar las ataduras porque nos vamos todos a la mierda. Que vivamos, como queremos, los de la pluma con su pluma y sus obsesiones; los recién casados, en sueños; los chantajistas, en equilibrio insospechado; los corruptos, haciéndose un poco más humanos; los que están dentro del armario, que salgan; y los que están fuera, que sigan fuera. Que, al fin y al cabo, nadie piensa en nosotros. Creo que eso es lo que quiere decir aunque perfectamente puedo estar equivocado. Ya me dirás cuando vayas a verla.
Abrazos landistas.

Anónimo dijo...

Bien, pues como yo no soy Boyero ni nada que se le parezca supongo que me permitirás hacer toda la sangre del mundo con respecto a este auténtico bodrio, que, sí, que ya he visto. Ya sabéis que siempre me suelo fiar de vuestros criterios, pero esta vez, muchachos, creo que os habéis quedado cortísimos. Porque ya había oído que la peli era mala, pero... ¿tanto?

Yo creo que la peli, efectivamente, como dice Carpet, es un fraude. Lo que me lleva a pensar si realmente también su director también lo es. Sí, es verdad que ha visto y "entiende" mucho de cine, y es más inteligente de lo que deja entreveer en su imagen pública, pero, coñe, que lo demuestre. En el caso de esta película creo que es víctima de lo que critica. Como dices en el artículo, se puede entender como una crítica al momento actual que vivimos, y ese es el argumento que esgrimen mucho para seguir justificando lo injustificable. Pero, si haces algo para criticar cómo estamos, o hazlo más sutil y menos facilón, o sinceramente, haz otra cosa que haga que merezca la pena gastarse ocho euros en una entrada de cine, que estamos muy jodidos para tontás, sí. Claro, que en mi caso no se cumplió porque pasé religiosamente por taquilla, bueno pero es que yo me lo trago todo (ves hasta me contagio de los chistes fáciles).

Y esto me lleva a pensar la segunda cuestión. Si Almodóvar es realmente un fraude, o nos han vendido muy bien la moto, o sencillamente ha pasado su momento. Creo en este sentido que de lo que siempre ha adolecido el personaje es de dejarse arrastrar demasiado por las modas y por la coyuntura. Quizá eso no le haga tener el peso que un director que "entiende" tanto de cine debiera tener. Fíjate que, a pesar, de que últimamente se ha volcado en el melodrama más desgarrador, se le sigue teniendo la percepción de un director ligero, y la expresión "esto es de Almodóvar" se emplea con frecuencia para películas o situaciones que rozan lo surrealista y lo esperpéntico.

Abrazos en clase turista

Carpet dijo...

Bueno, yo diríaque ves demasiadas buenas intenciones y una profundidad en el mensaje de la película que creo que no se merecen.

En cuanto a la crítica, la de Boyero fundamentalmente y la de otros con más mano izquierda, yo creo que Almodovar se lo merece. Yo no creo que, como dice Dexter, Almodovar sea un fraude o esté muy sobrevalorado ni que haya pasado su momento (auqnue yo siempre haya pensado que es/era el mejor vendedor de humo de este pais, hasta que llegó Santiago Segura). Creo que Pedro acumula muchas virtudes en su cine y que algunas de sus obras no son absolutamente redondas por que a veces se le va la olla con destellos precisamente "almodovarianos" que no sólo no ayudan sino que estropean gran parte de la película, por ejemplo el tigre de "La piel que habito" es uno de ellos o Carmen maura regada en "la ley del deseo" o...
Ahora bien, si eres un creador, y Pedro lo es, tus obras están expuestas a lo que puedan opinar de ellas y si te hinchas como un pavo cuando pintas "El jardín de las delicias" (por poner un cuadro no necesariamente del mismo nivel artístico que sólo es un ejemplo) no puedes esperar que te sigan encumbrando cuando haces un garabato (y aquí el ejemplo es más acorde con la calidad real de la peli).

También pienso que Boyero yerra el tiro al comentar lo de la bondad de la bisexualidad pero el tono y el resto de la crítica me parece bastante ajustado, por más que la postura vital un tanto cínica de Boyero amargue tanto.

Y volviendo al inicio, y al supuesto mensaje que Pedro dices que lanza, a mi me parece que todo eso es un "a posteriori" y por eso es tan tópico. A mi me da que el tipo quiso hacer una de gracia porque estaba demasiado serio ultimamente, tal y como el mismo ha reconocido, y buscando partió precisamente del "I´m so excited" que el debió imaginar en un momento de cachoneo personal y lo fue envolviendo de historietas. Y en las historietas para no pensar mucho me cojo el periodico y hago unas risas: Barbara Rey (Norma Boss) cortesana de alto nivel con videos comprometedores hasta paar el Rey, un banquero-timador llamado ¡¡¡Mas!!! que construyó un aeropuerto sin aviones, un actor ligón llamado Ricardo Galán (vamos es que hasta los nombres son tópicos), la superstición nacional en forma de Medium (una mierda personaje para Lola Dueñas que hace loq ue puede), un asesino a sueldo que es mejicano que en españa de eso no hay.....¿Y la pareja de novios?, ¿que estupidez era esa? ¿qué sentido tenían?...¿que un macarra como el Duque era culero? ¿que las mujeres follan mejor dormidas que despiertas?...

Muy triste, repito que me parece todo un sin sentido y que cualquier mensaje, incluso el que propones, es tan superficial que no debe ni considerarse...
Para mi, es una de Torrente pero con menos gracias, si cabe.

Abrazos profundos

Anónimo dijo...

Sí, hemos insistido mucho en ese desequilibrio existente en la filmografía de Almodóvar. Yo pienso que a excepción de "Mujeres..." que esa sí es una comedia pura, "Qué he hecho yo" donde da en el clavo y "Átame" que me parece una propuesta muy fresca y aborda EL tema de la filmografía almodovariana por excelencia que es el deseo, Pedro no tiene ninguna película redonda. "La ley del deseo" que sí que es una peli que como a Carpet me llega más personal que cinematográficamente se debate todo el tiempo entre el drama desgarrador y el esperpento puro, pero no es una baza que necesariamente le beneficie, y eso que a diferencia del madrileño la escena del "riégueme" me parece un momentazo. Y "Hable con ella" me parece directamente mejor guión que película.

Así que opino que la obra de Almodóvar está marcada permamenente por el desequilibrio.
Creo que los pecados mortales de esta película ya los habéis apuntado vosotros, por un lado no se puede hacer una comedia en el 21con ¿gracietas? de los 80 (sencillamente los chistes de los gays están tan pasados que ya ni hacen pupa). Y sobre todo no se puede hacer una comedia si no tienes ganas de reir ni de hacer reir. Y si la haces, lo dicho, hazla bien.

Abrazos con jet lag

Carpet dijo...

Y las autoreferncias de chistes que entonces cayeron bien : El "yo no puedo mentir" o la portera a la que le cuentan todo "porque luego ella no dice nada", son dos copias del garn momento de la gran Chus Lampreave y su "yo no puedo mentir que soy testiga".

O la copiada a "Aterriza como puedas": ¿Y ha pasado alguna vez antes? ( por lo del tren de aterrizaje) y que la respuesta sea sobre si se enrollaron con el piloto (o algo así que ni me acuerdo)...

Y por cierto, mucha promo encubierta, ¿no?...que digo yo que Samsung habrá pagado una pasta por que su teléfono sea protagonista durante una buena parte de la peli....

Abrazos publicitados.

César Bardés dijo...

Caramba, menos mal que no soy Pedro Almodóvar.
Chicos, perdonad el retraso pero problemas escolares me han impedido estar antes con vosotros. Gracias por vuestra paciencia.
Pedro Almodóvar, Dex, sí sabe de cine (lo que no quiere decir, ni mucho menos que lo entienda). Tienes bastante razón en decir que es víctima de lo que critica. Es el típico tío que se ha beneficiado de muchas cosas y que está dentro de este mismo sistema que se ha ido a la mierda. ¿Que es facilón cómo lo hace? Sí, sin duda. Si algo se le puede reprochar a la película es esa sensación de desidia, ésa autocomplacencia que parece que dice: "Da igual lo que yo haga...os lo vais a tragar igual". También hay algo de verdad en eso que dices de que tal vez Almodóvar está anticuado. De hecho, es algo que yo le vengo reclamando desde hace tiempo porque es un hombre que se ha quedado anclado a una forma de pensar, una estética y una forma de decir las cosas muy propias de los ochenta. Y ahora ya va interesando muy poco entre otras cosas porque quizá los ochenta y los setenta fueron las etapas más impersonales de la sociedad y él forma parte de ella. Desde hace años ya, que publiqué un artículo sobre toda su carrera, le vengo reclamando una película de cine negro pura y dura, que se deje de melodramas de folletín rosa, de chistes amariconaos, de gilipolleces varias y se pase a hacer cine...a contar una historia porque no la cuenta. Creo que ha caído en la dinámica de que le hacen más gracia los personajes que pone en juego que la misma historia que intenta contar. No me parece mal que se diga que "esto es de Almodóvar". Yo he vivido situaciones en las que, sin exagerar ni un poquito, llegué a decir "esto es buñuelesco" (mucho más surrealista que Almodóvar, se pongan como se pongan los "modernos") o "esto es berlanguiano" (algo mucho más frecuente de lo que nos gusta admitir).
La diferencia entre Segura y Almodóvar, Carpet, está en que Segura no engaña. Te vende humo pero él, con su estilo personal, te lo dice a la cara: "Te estoy vendiendo humo y vas a ir igual a ver mi película". Apuntas también a la autocomplacencia en la que cae, en la seguridad de que él hace cine bueno, diferente y el que no lo comprende no es porque la película sea mala, sino porque el colega no entiende de buen cine y está muy lejos de la realidad que pretende mostrar aunque sea de esa forma que, más que esperpéntica, es directamente grotesca. Es una especie de "parada de los monstruos" moral dicha con luces rojas y un chicle en la boca. También puede ser que todo sea un envoltorio a un chiste que se le ocurre entre amigos con el "I´m so excited". Puede ser, no lo niego. Es arriesgado decirlo pero puede que no andes para nada descaminado.
Es verdad se me había olvidadado la gracia que tiene "¿Qué he hecho yo para merecer esto?" a pesar de su gracia de poner un barrio que, ni mucho menos, es marginal en la película.
En cuanto al autohomenaje continuo, pues sí, también lo hay. Una dosis más de autocomplacencia y de decirse al espejo lo genial que es. En cuanto a lo de la promo...bueno, a mí eso no me parece mal siempre y cuando haya alguien que esté dispuesto a pagar. No olvidemos que Almodóvar es el único cineasta español que rueda sin subvenciones (y de ahí arrancó toda aquella polémica entre "Hable con ella" y "Los lunes al sol").
Abrazos de primera clase.